La división de la carta en ángulos

La división de la carta en ángulos

Antes de entrar en la explicación de las Casas es necesario saber que la primera división que utilizamos para el estudio de una carta es el trazado sobre el sistema solar de cuatro ángulos en el que las Casas son subdivisiones de la rotación diaria de la Tierra sobre su eje. Aunque esto parezca una visión geocéntrica medieval no es más que un instrumento de precisión en el que intervienen la rotación axial de nuestro planeta con el movimiento de los otros cuerpos del sistema solar alrededor del Astro Rey pero siempre visto desde el escenario terrestre en el que se desarrollan nuestras experiencias vitales.

Dos ejes crean la división de una carta en cuatro ángulos:

1º El eje del horizonte

Si miramos desde un lugar de la Tierra, a cualquier hora, hacia el Este, donde se junta el cielo y la tierra, ahí se sitúa un grado del signo zodiacal que se esta elevando. Al signo zodiacal que ocupa ese punto oriental del horizonte se le llama Ascendente. Mientras tanto por el Oeste se va ocultando en el grado del signo opuesto al que se le denomina Descendente.

La unión de estos dos puntos forma el primer eje y divide el horóscopo en un hemisferio superior y uno inferior.

Los planetas que se encuentran en una carta cerca del ascendente en el momento del nacimiento están ascendiendo o ya lo han hecho, mientras que los planetas cerca del descendente se están poniendo.

El hemisferio superior muestra la interconexión que establecemos con los demás y con el mundo exterior. El hemisferio inferior se centra en el desarrollo de la individualidad y en el mundo interior.

2º El eje del meridiano

Si ahora miramos desde el mismo sitio que nos encontramos hacia arriba, sobre nuestras cabezas, habrá un grado del signo zodiacal que culmina en el meridiano superior, el punto situado exactamente al Sur. Se llama Medio Cielo (MC), en latín Médium Coeli (medio de los cielos). En el grado del signo opuesto, en el punto inferior al Norte se encuentra el Bajo Cielo (IC), en latín Inum Coeli (cielos inferiores).

Los planetas cercanos al MC ocupan el lugar más alto posible en el cielo en el momento del nacimiento, sobre nuestra cabeza, mientras que los cercanos al IC están, por decirlo de alguna manera, debajo de nuestros pies al otro lado del planeta.

En el hemisferio izquierdo, los planetas están saliendo o emergiendo del horizonte, y esto denota acción. En el hemisferio derecho, los planetas se ponen o están descendiendo en el horizonte, y esto denota reacción.

La línea AC-DC representa el horizonte del lugar donde nacimos. Es decir, todos los planetas que en nuestro gráfico están por encima de esa raya horizontal podían ser vistos en el cielo en el preciso instante de nuestro nacimiento, porque estaban por arriba del horizonte. En cambio, todos los astros que tenemos en nuestro gráfico por debajo de esa raya, no se podían ver cuando nacimos, pues se encontraban por debajo del horizonte de nuestro lugar natal.

Resumidamente, tal como he explicado, el ascendente es el punto cardinal Este, y es por dónde salen el sol y el resto de los planetas hasta llegar a lo más alto del horóscopo o Medio Cielo (Sur). Luego comienzan a bajar y se meten por el Descendente (Oeste) hasta el Bajo Cielo (Norte).

Si nuestro Sol natal esta cerca del Ascendente, quiere decir que nacimos al amanecer, si esta próximo al Medio Cielo, nacimos a mediodía, mientras que si el astro solar se ubica cercano al Descendente, entonces nacimos cuando el sol se ponía, y a medianoche se sitúa cerca del Bajo Cielo.

Y con este eje es donde empiezan las casas angulares y el resto de las casas de las que hablaremos en el capitulo siguiente.

SIGNOS, PLANETAS, CASAS

QUÉ, CÓMO Y DÓNDE

Del mismo modo que la información periodística se basa en las 5 uves dobles: who, what, where, when and why (quién, qué, dónde, cuándo y porqué) para poder comunicar una noticia precisa; los tres factores básicos de una carta astrológica –los planetas, los signos y las casas-, responden a las preguntas qué, cómo y dónde.

Los planetas nos indican qué energía está actuando y por lo tanto nos muestran la experiencia que se desprende de esta interacción.

Los signos determinan cómo actúan dichas energías o de qué modo suceden ese tipo de acontecimientos.

Las casas indican dónde se desarrollan las energías o el lugar de la vida en el que se producen ciertos sucesos.

La relación simbólica entre ellos es fundamental ya que a cada signo le rige un planeta y a su vez esta relacionado con una casa. No obstante, hasta la aparición de Urano había otras regencias, pero actualmente la relación entre el signo zodiacal, el planeta regente y la casa astrológica es la siguiente:

SIGNO PLANETA CASA

Aries Marte I

Tauro               Venus II

Géminis Mercurio III

Cáncer Luna IV

Leo Sol V

Virgo Mercurio VI

Libra Venus VII

Escorpio Plutón VII

Sagitario Júpiter IX

Capricornio Saturno X

Acuario Urano XI

Piscis Neptuno XII

ASTRONOMÍA Y MITOLOGÍA

Etimológicamente, la palabra planeta proviene del latín que la tomó del griego πλανήτης planētēs y quiere decir: vagabundo, errante. El origen de este término proviene del movimiento aparente de los planetas con respecto al fondo fijo de las estrellas que, a pesar de moverse por el firmamento según las diferentes estaciones, mantienen sus posiciones relativas.