Enseñar Astrología

En este blog me he propuesto una tarea que es, al mismo tiempo, agradable en extremo y en extremo difícil: dar a conocer en esta sección y de una manera sencilla los fundamentos básicos de la Astrología. La tarea es agradable porque he dedicado más de la mitad de mi vida, y es mucha, al estudio, enseñanza, difusión, lucha y, ¿por qué no?, amor a esta eterna ciencia-arte. Pero la tarea que se me he propuesto es difícil porque sé que no basta con lo dicho anteriormente, la astrología, y el que avisa no es traidor, no es fácil de aprender. Como cualquier otro arte complejo, es posible practicarlo toda la vida sin dejar nunca de aprender cosas. Pero aprender astrología es un trabajo que compensa, así que vamos a lanzarnos a esta gloriosa aventura.

Esta sección se va a dividir en cuatro apartados que podréis coleccionar a modo de fichas:

1º- Introducción y textos astrológicos.
2º- Signos, planetas, casas…
3º- Astronomía y mitología.
4º- Respuesta a las preguntas que deseéis hacer.

Introducción y textos astrológicos

La astrología, o tratado de los astros, ha acompañado a la humanidad en su búsqueda de sentido, desde el origen del pensamiento hasta el siglo XVII, momento en el que se pasa a un pensamiento más racionalista, otorgando un papel preponderante a la ciencia y comenzando una etapa donde se da auge a la astronomía. Ésta, sin embargo, no ha podido suplantarla, porque la astrología es algo más amplio, más simbólico y, a la vez, más humilde, porque se vale de la astronomía, de la psicología, de las matemáticas, de la medicina, etc…, sin pretender anular ninguna de estas ciencias, entendiendo que todas ellas deben coexistir como lenguajes que ayudan a transitar por la vida y a mejorarla.
Raros son los saberes que, como la astrología, deben hacer frente perpetuamente a sus detractores. Por eso, desde esta sección vamos a defenderla tanto con textos propios como de otros autores a los que nos referiremos.

Signos, planetas, casas….

Lo que denominamos Zodíaco -literalmente "Cinturón de animales"- es un imaginario cinturón celeste que se divide, desde tiempo de los caldeos, en doce zonas iguales de treinta grados cada una, contadas sobre la eclíptica solar, que representa los doce signos zodiacales. Se inicia en el grado 0 (0º) del signo de Aries (punto vernal, inicio de la primavera) continuando los demás signos zodiacales en sentido contrario a las manecillas del reloj.

Astronomía y mitología

La primera astrología mesopotámica sumerge sus raíces en la antigua cosmogonía sumeria. No es fatalista, ni causalista, sino que la explicación que daban a los acontecimientos la entendían y la fundamentaban en la correspondencia que establecían entre lo de arriba y lo de abajo, lo celeste y lo terrestre, es decir, entre Anu (etimológicamente lo arriba), el dios creador, sin función particular, y Ea (etimológicamente señor de abajo), dios del conocimiento y civilizador del género humano. Su relación estaba administrada por Enlil (etimológicamente señor atmósfera), el maestro de los destinos, regidor del espacio entre el cielo y la tierra.

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LAS CASAS ASTROLOGICAS

LAS CASAS ASTROLOGICAS

Ya expliqué en el artículo anterior la primera división de la carta en cuatro ángulos. Recordemos: el primer eje es el Ascendente-Descendente y el segundo Medio Cielo-Bajo Cielo. Estos son cuatro puntos de intersección de los dos ejes con la eclíptica los que van a determinar la división de casas del horóscopo.

         
Cada cuadrante se va a dividir en tres dando lugar a las doce casas, la línea que las separa a cada una es la que vamos a llamar Cúspide.

El método de cálculo para dividir los cuadrantes es uno de los temas que ha generado más controversia entre los astrólogos. Aunque actualmente la gran mayoría -entre los que me encuentro- se decantan por el sistema Placidus o Plácido. La división de las casas supone complicadas cuestiones de geometría espacial por lo que, después de señalar los otros sistemas, Placidus va a ser el único que voy a desarrollar aquí.

Se clasifican hasta veinticinco sistemas bajo tres encabezamientos: los eclípticos (el de casas iguales y el de Porfirio), los espaciales (Campanus y Regiomontanus) y los temporales ( Plácido, Koch y topocéntrico)

                 

El sistema de casas de Plácido

Placidus de Titus (1603-1668), un monje benedictino español y profesor en la Universidad de Pavía, fue quién ideó este método. Utilizando esta división de las casas, publicó treinta biografías de personajes eminentes indicando por adelantado el curso que seguirían sus vidas.

Este sistema está basado en la división en tres secciones del tiempo que necesita cada grado de la eclíptica para pasar del Ascendente al Medio Cielo. Así se consiguen las cúspides de la casa XII y XI, la del Ascendente es la que corresponde a la casa I. En los signos, grado y minuto opuestos se encuentran las cúspides de las casas V, VI y VII.

De la misma manera, el tiempo que necesita cualquier grado para ir desde el IC al ASC se divide en tres secciones para obtener las cúspides de las casas II y III, los del IC y MC corresponden a las IV y a la X. En los signos, grado y minuto opuestos se encuentran las cúspides de las casas VIII y IX.

Y, así, ya tenemos las doce casas. Aunque matemáticamente es uno de los sistemas más difíciles de calcular si no se poseen las tablas necesarias o un programa astrológico adecuado, gracias a Internet esto ha dejado de ser un problema.

Clasificación de las casas por cualidades:

          Casas Angulares: Primera, cuarta, séptima y décima. Son las casas de la acción y la iniciativa. En ellas generamos y liberamos energía.

         Casas Sucedentes: Segunda, quinta, octava y undécima. Son las casas de la fijación y el perfeccionamiento. En ellas estabilizamos y concretamos la energía.

         Casas Cadentes: Tercera, sexta, novena y doceava. Son las casas de la reorganización y de la readaptación. En ellas distribuimos y reajustamos la energía.

Clasificación de las casas por elementos:

         Casas de Fuego: una, quinta y novena. Se denominan la “Trinidad del Espíritu” y están asociadas, entre otras cosas, con la voluntad, la pasión y la necesidad de expresarnos.

         Casas de Tierra: segunda, sexta y décima. Se denominan “La Trinidad de la Materia” y están asociadas con las formas concretas, las cosas tangibles, lo que consideramos la existencia material.

         Casas de Aire: tercera, séptima, undécima. Se denominan la “Trinidad de la Relación” y están asociadas con el intelecto, la comunicación y el intercambio.

         Casas de Agua: Cuarta, octava y doceava. Se denominan la “Trinidad del Alma” y están asociadas con las emociones, con los sentimientos y con lo más profundo y oculto.

LAS DOCE CASAS

Aquí voy a daros un breve recetario de la interpretación de las casas -en las que más adelante iremos profundizando- y las edades en las que más especialmente se activan:

Casa I (Ascendente) - La Personalidad (0 a 6 años)

            El ascendente nos dice como nacemos y como hacemos los cambios importantes en la vida. La casa I describe la personalidad, el temperamento y la constitución de la persona.

Casa II - Valores y Posesiones (6 a 12 años)

         La casa dos nos habla de lo que valoramos y de lo que nos da seguridad. Esto incluye la relación entre nuestras emociones, la sexualidad y el dinero.

Casa III – Comunicación (12 a 18 años)

         Nos explica como nos comunicamos de todas las formas: escribiendo, hablando, intercambiando información. Cómo son nuestros hermanos y cómo realizamos los viajes cortos.

Casa IV - Raíces y Orígenes (18 a 24 años)

         Describe cómo nos relacionamos con la familia y nuestra actitud hacia la tierra y el hogar. El padre o la madre (dependiendo como lo vivamos). Como son los finales.

Casa V - Placer y Creatividad (24 a 30 años)

         Los placeres frívolos, entre ellos la sexualidad y el juego en general, y todo tipo de expresión creativa, incluyendo los hijos, encuentran su hogar aquí.

Casa VI - Trabajo y Rutina (30 a 36años)

         Las circunstancias que nos rodean en nuestra vida cotidiana, incluyendo el ambiente laboral y la rutina diaria. La salud, la belleza y los animales domésticos.

Casa VII - Relaciones (36 a 42 años)

         La clase de pareja hacia quien nos sentimos atraídos. El enemigo declarado. Describe el tipo de relación y sociedad que buscamos con otra persona.

Casa VIII - Pérdidas y Bienes (42 a 48 años)

         Nos muestra cómo nos relacionamos con los bienes comunes y cómo nos manejamos con la pérdida material. La muerte como última pérdida material.

Casa IX - Filosofía y Países (48 a 54 años)

         Describe nuestra inclinación espiritual, nuestra filosofía de la vida y nuestra búsqueda de sentido. Los viajes largos y nuestra relación con otras culturas.

Casa X (MC) - Ocupación y Vocación (54 a 60 años)

         Afecta a nuestra elección profesional y a nuestro sentido de la vocación. Describe nuestra imagen social y también a uno de nuestros progenitores.

Casa XI - Amigos y Conocidos (60 a 66 años)
         Describe cómo nos relacionamos con amigos, grupos y, en general, con la sociedad en la que vivimos. También es la casa de los deseos y las esperanzas.

Casa XII - Más allá de lo Personal (66 a 72 años)                                           Se la relaciona con hospitales, prisiones, monasterios y cualquier otro retiro. El inconsciente y los sueños. El misterio, los secretos y el más allá.

HORÓSCOPO

HORÓSCOPO

Hoy vamos a aclarar una de las confusiones que se crean en torno a la astrología. Cuando se habla de Astrología con cualquier persona que no tiene suficientes conocimientos sobre la materia, lo primero que suele aparecer es la palabra horóscopo. La gran mayoría conocerá su signo zodiacal, algunos pedirán que se les hable acerca del suyo y otros, los escépticos, dirán que ellos “no creen en eso".

Generalmente, estas superficiales nociones, sólo se refieren a la seudo astrología divulgada a diario en los medios de comunicación, donde no se suelen hacer eco de los estudios adecuados que profundizan en la realidad del hecho astrológico.

La palabra horóscopo tiene un uso común erróneo. Se considera que es un pronóstico diario que sólo se relaciona con los signos solares sin tener en cuenta el resto de las variables que lo definen.

Hagamos historia. La palabra horóscopo es de origen griego y deriva de “oros”, horizonte, y “skopein”, examinar. Aunque se ha acabado traduciendo debido a su utilización, de muy distintas maneras, como: “marcador de la hora”, “consideración de la hora”, "observar la hora” y “examinar la hora”.

En la antigüedad clásica era el término con el que se conocía lo que ahora llamamos "ascendente", o inicio de una carta o mapa astrológico y que se refiere al signo zodiacal que se levanta por el horizonte en el momento exacto de un nacimiento.

Ya, en la etapa árabe y en el medioevo europeo, la palabra "horóscopo" se convirtió en sinónimo de "carta astral" que es el uso que se le continúa dando hasta la fecha entre los astrólogos.

Un horóscopo es una carta natal y para poder realizar uno con fiabilidad y profesionalidad es indispensable la fecha, hora y lugar de nacimiento de cada persona de forma exacta. Es por esta razón que los horóscopos de las revistas, periódicos y otros medios de comunicación no tienen ninguna validez ya que, entre otras imprecisiones, se basan únicamente en la posición del Sol, suponiendo que, al menos eso, se tenga en cuenta.

Partiendo de esta realidad, es en parte comprensible la desconfianza que generan dichos horóscopos ya que si su premisa de partida fuera cierta a todas las personas del mismo signo solar les pasaría lo mismo el mismo día, siendo, sin embargo, la carta natal de cada persona, única.

Un horóscopo es, por tanto, una carta o gráfico del cielo en el que figuran los planetas y los signos zodiacales. Decir horóscopo es lo mismo que decir carta astral (gráfico de los astros) que tiene valor ilustrativo para una persona cuando se señalan en ella los datos exactos que concurrían en el momento de nacer. De ahí que, cada uno de nosotros tenemos una carta astral singular.

Hay varios tipos de carta astral que son usados por los astrólogos para hacer sus estudios: La carta astral básica y fundamental que es la llamada carta natal o carta astral de nacimiento y que consiste en un gráfico del cielo para el momento y lugar exactos en que nació la persona. Como hemos dicho, si no se conoce la hora de nacimiento con exactitud, no se puede hacer la carta natal aunque con una hora aproximada, hay métodos de corrección para elaborarla (ya profundizaremos sobre este tema en su momento).

SIGNOS, PLANETAS, CASAS….

El horóscopo se suele representar con varias circunferencias concéntricas que tienen 2 divisiones de doce partes. Una de esas divisiones corresponde a los "signos astrológicos" que tienen todos treinta grados de arco.

Dibujar en el esquema vacío, para acostumbraros, los signos tal y como están en la derecha:

ASTRONOMÍA Y MITOLOGÍA

La contemplación del cielo siempre ha fascinado a la humanidad. Ha sido, y continúa siendo, la fuente de todos los mitos y observaciones científicas. Ya nuestros antepasados de la Edad de Piedra hacían incisiones en huesos de animales para representar las fases lunares. Es en Mesopotamia (en el Irak actual) donde llegaron a tener una gran comprensión del movimiento de los distintos cuerpos celestes. Fueron los griegos los que heredaron estos conocimientos, aportando una gran riqueza de datos y conceptos astronómicos. Y los que comenzaron a nombrar a los planetas del sistema solar, y también algunas de las estrellas y constelaciones, con nombres de su prolífica mitología. Cultos que usurpa la Roma Imperial cambiando el nombre de sus dioses y aportando muy poco a sus leyendas. Con estos nombres es como continuamos llamando a los planetas del sistema solar:

PLANETA MITO

Mercurio Mercurio (romano), Hermes (griego)

Venus Venus (romana), Afrodita (griega)

Marte Marte (romano), Ares (griego)

Júpiter Júpiter (romano), Zeus (griego)

Saturno Saturno (romano), Cronos (griego)

Urano Urano (griego)

Neptuno Neptuno (romano), Poseidón (griego)

Plutón Plutón (romano), Hades (griego)

La división de la carta en ángulos

La división de la carta en ángulos

Antes de entrar en la explicación de las Casas es necesario saber que la primera división que utilizamos para el estudio de una carta es el trazado sobre el sistema solar de cuatro ángulos en el que las Casas son subdivisiones de la rotación diaria de la Tierra sobre su eje. Aunque esto parezca una visión geocéntrica medieval no es más que un instrumento de precisión en el que intervienen la rotación axial de nuestro planeta con el movimiento de los otros cuerpos del sistema solar alrededor del Astro Rey pero siempre visto desde el escenario terrestre en el que se desarrollan nuestras experiencias vitales.

Dos ejes crean la división de una carta en cuatro ángulos:

1º El eje del horizonte

Si miramos desde un lugar de la Tierra, a cualquier hora, hacia el Este, donde se junta el cielo y la tierra, ahí se sitúa un grado del signo zodiacal que se esta elevando. Al signo zodiacal que ocupa ese punto oriental del horizonte se le llama Ascendente. Mientras tanto por el Oeste se va ocultando en el grado del signo opuesto al que se le denomina Descendente.

La unión de estos dos puntos forma el primer eje y divide el horóscopo en un hemisferio superior y uno inferior.

Los planetas que se encuentran en una carta cerca del ascendente en el momento del nacimiento están ascendiendo o ya lo han hecho, mientras que los planetas cerca del descendente se están poniendo.

El hemisferio superior muestra la interconexión que establecemos con los demás y con el mundo exterior. El hemisferio inferior se centra en el desarrollo de la individualidad y en el mundo interior.

2º El eje del meridiano

Si ahora miramos desde el mismo sitio que nos encontramos hacia arriba, sobre nuestras cabezas, habrá un grado del signo zodiacal que culmina en el meridiano superior, el punto situado exactamente al Sur. Se llama Medio Cielo (MC), en latín Médium Coeli (medio de los cielos). En el grado del signo opuesto, en el punto inferior al Norte se encuentra el Bajo Cielo (IC), en latín Inum Coeli (cielos inferiores).

Los planetas cercanos al MC ocupan el lugar más alto posible en el cielo en el momento del nacimiento, sobre nuestra cabeza, mientras que los cercanos al IC están, por decirlo de alguna manera, debajo de nuestros pies al otro lado del planeta.

En el hemisferio izquierdo, los planetas están saliendo o emergiendo del horizonte, y esto denota acción. En el hemisferio derecho, los planetas se ponen o están descendiendo en el horizonte, y esto denota reacción.

La línea AC-DC representa el horizonte del lugar donde nacimos. Es decir, todos los planetas que en nuestro gráfico están por encima de esa raya horizontal podían ser vistos en el cielo en el preciso instante de nuestro nacimiento, porque estaban por arriba del horizonte. En cambio, todos los astros que tenemos en nuestro gráfico por debajo de esa raya, no se podían ver cuando nacimos, pues se encontraban por debajo del horizonte de nuestro lugar natal.

Resumidamente, tal como he explicado, el ascendente es el punto cardinal Este, y es por dónde salen el sol y el resto de los planetas hasta llegar a lo más alto del horóscopo o Medio Cielo (Sur). Luego comienzan a bajar y se meten por el Descendente (Oeste) hasta el Bajo Cielo (Norte).

Si nuestro Sol natal esta cerca del Ascendente, quiere decir que nacimos al amanecer, si esta próximo al Medio Cielo, nacimos a mediodía, mientras que si el astro solar se ubica cercano al Descendente, entonces nacimos cuando el sol se ponía, y a medianoche se sitúa cerca del Bajo Cielo.

Y con este eje es donde empiezan las casas angulares y el resto de las casas de las que hablaremos en el capitulo siguiente.

SIGNOS, PLANETAS, CASAS

QUÉ, CÓMO Y DÓNDE

Del mismo modo que la información periodística se basa en las 5 uves dobles: who, what, where, when and why (quién, qué, dónde, cuándo y porqué) para poder comunicar una noticia precisa; los tres factores básicos de una carta astrológica –los planetas, los signos y las casas-, responden a las preguntas qué, cómo y dónde.

Los planetas nos indican qué energía está actuando y por lo tanto nos muestran la experiencia que se desprende de esta interacción.

Los signos determinan cómo actúan dichas energías o de qué modo suceden ese tipo de acontecimientos.

Las casas indican dónde se desarrollan las energías o el lugar de la vida en el que se producen ciertos sucesos.

La relación simbólica entre ellos es fundamental ya que a cada signo le rige un planeta y a su vez esta relacionado con una casa. No obstante, hasta la aparición de Urano había otras regencias, pero actualmente la relación entre el signo zodiacal, el planeta regente y la casa astrológica es la siguiente:

SIGNO PLANETA CASA

Aries Marte I

Tauro               Venus II

Géminis Mercurio III

Cáncer Luna IV

Leo Sol V

Virgo Mercurio VI

Libra Venus VII

Escorpio Plutón VII

Sagitario Júpiter IX

Capricornio Saturno X

Acuario Urano XI

Piscis Neptuno XII

ASTRONOMÍA Y MITOLOGÍA

Etimológicamente, la palabra planeta proviene del latín que la tomó del griego πλανήτης planētēs y quiere decir: vagabundo, errante. El origen de este término proviene del movimiento aparente de los planetas con respecto al fondo fijo de las estrellas que, a pesar de moverse por el firmamento según las diferentes estaciones, mantienen sus posiciones relativas.